Ilusionado, orgullo y feliz, así se muestra David Sánchez con su fichaje por el club cadista. Pese a la cadena de problemas que le puso la UD Melilla para facilitar su salida, pidiendo incluso que perdonara los cinco meses de sueldo que se le debían, la historia ha tenido final feliz.
Desde este lunes, el centrocampista ya se ejercita junto al resto de sus compañeros a las órdenes de Claudio Barragán, que espera aún varias caras nuevas en este mercado invernal.
A sus 33 años, Sánchez ha pasado por equipos destacados como Albacte, Alavés, Nàstic, Getafe, Elche... y por último, el Melilla, en el que ha demostrado que tiene calidad a raudales como lleva dejando claro desde sus inicios en las categorías inferiores del Sevilla y del Barcelona.
Su vinculación con el club gaditano será para lo que resta de temporada y una más, aunque ambas partes esperan que se den los condicionantes que especifica el mismo contrato para prolongar su relación una tercera temporada. Esa sería la clara señal de que la apuesta ha salido bien.
De momento, no podrá jugar esta semana porque el mercado no abrirá hasta el lunes día 4, pero llega en forma y podría estrenarse en el partido de Copa del Rey ante el Celta.
