sandra sánchez n. jerez
Las Fiestas de la Vendimia han llegado este año de la mano del 80 aniversario del primer Reglamento de la Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry y de su Consejo Regulador. Y para darle el protagonismo que se merece, el nuevo Gobierno local ha decidido alargar el calendario festivo de las dos semanas habituales a tres.
Para el segundo teniente de alcaldía y delegado de Dinamización Cultural, Francisco Camas, la prolongación del calendario de actividades de esta edición delas Fiestas de la Vendimia, “es un reflejo de la importancia que el Gobierno le da a esas fiestas”. Y ha reiterado la apuesta “por incluir más actividades y hacerlas lo más amplias posible”. Y ha declarado a Información que “hemos puesto toda la carne en el asador con estas fiestas porque entendemos que es un elemento primordial en la representatividad de nuestra industria y de nuestra cultura vitivinícola”.
Pero los hosteleros del centro no coinciden con las palabras de Francisco Camas, y aseguran que la prolongación de las fiestas ha provocado que “se disipe el impacto de las fiestas en los bares”. El encargado de la céntrica cervecería El Gorila, José Antonio Merlo, asegura que “septiembre es tradicionalmente un mes muy bueno para la hostelería”, pero que este año “tal vez se haya visto menos público los días entre semana porque ha habido menos actividades”. Para Merlo, “el habitual pasacalles que se celebrara por estas fechas atraía a mucho público y sobre todo público familiar, que consume mucho”. Los fines de semana en la concurrida Plaza de Plateros “han sido muy buenos”, y este año se ha advertido la presencia de más público local y nacional, y menos extranjeros”, a pesar de que en esta edición “no ha habido ningún tipo de acto cultural en esta plaza como se ha hecho otros años”.
Los hosteleros insisten en que “hay que mimar todas las actividades culturales que se realizan en el centro porque es lo que atrae el consumo”, y más ahora que “se ve un resurgir de la vida en el centro y todo puede influir en que eso se consolide o se estropee”. E insisten en que “no pueden hacerse actos previo pago, porque entonces la gente no va”.
De todo el programa de actividades de las Fiestas de la Vendimia, de las que se han celebrado solo en el centro, en torno al 70 % era previo pago de entrada, con precios que han oscilado desde los 10 euros, a los 25 euros de las catas magistrales de las distintas bodegas en el Alcázar de Jerez. Fuera del centro, el programa contempla rutas en todo terrenopor las viñas más representativas del marco de Jerez.
Ante esa cuestión, Francisco Camas reconoció a Información que, “aunque las bodegas ya tienen un día de puertas abiertas durante las Fiestas de la Vendimia, “hay que incrementar esto y hacer más participativas las bodegas, también, implicando a hosteleros, consejo regulador, y delegación de cultura, e ir implicando progresivamente a más gente. Tenemos que remar todos en la misma línea”.
El programa de actividades “potencia la gran diversidad de oferta cultural y turística que tenemos en Jerez”, ha señalado el delegado de Dinamización cultural.
La élite de la Pisa de la Uva
Desde que el tradicional acto de la Pisa de la Uva cambió de fin de semana a día laborable, como este año, su poder de convocatoria ha quedado muy debilitado. El acto, que da comienzo oficial todos a las festividades del Primer Mosto, ha tenido una escasa participación ciudadana debido a que se celebró el martes 8 de septiembre a las ocho de la tarde.
Todo eso ha provocado que el acto quede reducido a la asistencia de las autoridades e invitados, pero con poca presencia ciudadana. A ello hay que sumar que las vendimiadoras son azafatas profesionales contratadas por una empresa de imagen y protocolo para que porten los canastos de uva durante el acto. Un detalle que está lejos de las fiestas participativas, como la del Carnaval de Cádiz, en las que son las jóvenes gaditanas, elegidas de forma popular, las encargadas de representar a su ciudad en unas fiestas tan señeras de la identidad de un pueblo.
“Sin ninguna duda sería interesante abrir el acto de la Pisa de la Uva para hacerlo más participativo. Habrá novedades el año que viene, no solo en el aspecto de las vendimiadoras, sino también en otros que ya estamos planteando, como es ampliar por ejemplo a los jóvenes la vivencia de la vendimia”, ha anunciado Francisco Camas a este medio.
Unas vendimiadoras que, además este año, han sido objeto de polémica, debido que no se presenciaron en el acto de la Pisa de la Uva, que quedó huérfano de azafatas.
