Que el ascenso del Cádiz es bueno para la ciudad es algo que no necesita explicación y el domingo se hizo más que evidente. Aunque el partido contra el Oviedo no iba a ser la tónica general de una campaña en Segunda A, desde el punto de vista de la expectación y el volumen de público que movió, no es menos cierto que una liga en esta categoría haría que los partidos fuesen más atractivos y propiciaría que más gente se trasladase a la ciudad cada domingo para echar el día.
Los bares, cafeterías y restaurantes de la zona del Paseo Marítimo y alrededores del estadio hacen un balance positivo del pasado fin de semana. Raúl Cueto, presidente de la Asociación de Café, Bares y Tabernas, aún no ha podido hacer un balance generalizado de la situación “pero imagino que el resto de establecimientos de la zona vivieron un domingo parecido al mío, y yo por mi parte en lo que se refiere a mis negocios no me puedo quejar”.
Aunque es pronto para saber cuánto aumentaron las ventas, Cueto se atrevió a aventurar que en torno a un “20 por ciento como mínimo” respecto a un domingo normal. “Sabemos que el ascenso a Segunda A no garantiza que esto vaya a repetirse todos los domingos, pero creo que los hosteleros nos conformamos con que vender la mitad de lo que hemos vendido en éste”.
Y tanto fue así que algunos se quedaron sin existencias. A Raúl en concreto le pidieron sillas, cerveza y algunas botellas. “Es algo difícil de prever porque superó las expectativas, aunque en nuestro caso estuvimos preparados para atender la demanda”.
Cueto quiso hace hincapié en el buen comportamiento del público: “Tuvimos clientes desde las 9 de la mañana hasta las 12 de la noche y teniendo en cuenta que la gente bebió, no hemos tenido que lamentar ningún incidente desgradable”.