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El Madrid comienza a carburar

Los dos equipos más ofensivos del campeonato salieron son muchas precauciones defensivas, sabedores del potencial del rival

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El Real Madrid venció por 90-71 a un Valencia que no pudo hacer nada en ningún momento y que se vio arrollado en los primeros lances del partido por un equipo que comenzó a dar sus primeras muestras de que comienza a carburar.

Los dos equipos más ofensivos del campeonato salieron son muchas precauciones defensivas, sabedores del potencial del rival. Pero fue el Real Madrid el que mejor puesta en escena tuvo con un 8-0 (min.3,45) amparado en un Ioannis Bourousis que se encargó de dominar bajo los aros.

Los jugadores de Pablo Laso se mostraron sueltos en ataque, pese a la defensa valenciana, al tiempo que consiguieron maniatar a sus rivales que fueron perdiendo la confianza en sus posibilidades conforme avanzaban los minutos.

El marcador siguió con su marcha inexorable a favor de los locales y concluyó el primer periodo registrando un claro 25-12 que las rotaciones de Velimir Perasovic, entrenador de los valencianos, no consiguieron minimizar.

La segunda unidad de Laso entró en el segundo acto y aumentó la distancia. Andrés Nocioni, Sergio Rodríguez y Jaycee Carroll comenzaron a ahondar en las diferencias.

Todavía agarrándose a automatismos de la temporada pasada, el Real Madrid comenzó a dar ejemplos de lo que puede llegar a hacer sobre una pista cuando la temporada esté más avanzada y la maquinaria funcione a pleno rendimiento.

Carroll, que renació en el último partido de Euroliga, dio nuevas muestras de su puntería y Sergio Rodríguez sacó a pasear la 'chacho chistera' con asistencias de fantasía que hicieron las delicias de la grada.

Si a esto le unimos el mejor funcionamiento de la defensa, con una zona presionante que, en esta ocasión sí, comenzó a dar réditos positivos al equipo, y un mayor 'hambre' que el rival en todas las acciones, no es de extrañar que el marcador al descanso fuese claro, 51-28. Sólo Bojan Dubljevic, con 8 puntos, destacó ligeramente en su equipo.

Hasta el presente el Valencia había tenido dos caras, una buena en España y otra con mucho margen de mejora en Europa, donde todavía no conoce la victoria en Euroliga. En el Palacio de deportes madrileño, el Real Madrid apagó de raíz cualquier posible brillo de los valencianos, con ganas, acierto, esfuerzo y trabajo.

El paso por vestuarios hizo que el Valencia reconsiderara su posición. Decidió atrincherarse y evitar una derrota de escándalo, endureciendo su juego defensivo. El Madrid no quiso entrar a una nueva guerra, máxime cuando la ventaja no descendió drásticamente, 58-34 (min.25).

Y sólo al final del periodo, el Valencia recortó algo la diferencia, 69-55 (min. 29), para un 71-55 al término tras un juego que decayó mucho en vistosidad.

Laso mantuvo las rotaciones preestablecidas y pese a que con dieciséis puntos de ventaja la victoria pareció asegurada, el Madrid volvió a la seriedad de su juego, tanto en defensa como en ataque, 79-57 (min.33).

No volvió la brillantez al juego de los locales, pero el Madrid dio las primeras muestras de que está comenzando a carburar y apenas necesitó del primer cuarto para sentenciar la victoria, 90-71, ante el Valencia. Cinco jugadores con dobles dígitos en anotación y ningún jugador por encima de los 24 minutos, otro de los datos a tener en cuenta. La temporada es larga y Laso y el Madrid parecen haber tomado nota.

Ficha técnica:

90 - Real Madrid (25+26+20+19): Rivers (2), Rudy (9), Ayón (5), Llull (10) y Bourousis (15) -equipo inicial-, Maciulis (6), Nocioni (10), Carroll (8), Reyes (12), Rodríguez (3), Campazzo y Mejri (10).

71 - Valencia (12+16+27+16): Ribas (8), Van Rossom (6), Sato (3), Lucic (4) y Loncar -equipo inicial-, Lishchuk (7), Martínez (16), Dubljevic (20), Vives (2) y Buycks (5).

Árbitros: Emilio Pérez, Carlos Peruga y Jacobo Rial. Sato (min.33) y Martínez (min.40) fueron eliminados por cinco personales.

Incidencias: Partido correspondiente a la quinta jornada de Liga disputado en el Palacio de Deportes de Madrid ante 10.028 espectadores.

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