Los 50 inmigrantes localizados a su llegada en dos pateras a Gran Canaria esta madrugada están en buen estado de salud, según han constatado los servicios de emergencia después de que dos de ellos, que ya han recibido el alta, fueran atendidos en un centro sanitario.
Los ocupantes de las dos barquillas han sido puestos ya a disposición de la Policía Nacional, competente para tramitar su expulsión del país conforme a lo previsto en la Ley de Extranjería, según ha confirmado a Efe Marco Aurelio Pérez, alcalde del municipio al que arribaron los inmigrantes, San Bartolomé de Tirajana.
En la costa de este municipio del sur de Gran Canaria está en marca en estos momentos una búsqueda por aire y mar al barajarse la hipótesis de que otro ocupante de una de esas pateras podría haber caído al mar antes de localizarse su embarcación, debido a que varios de los ocupantes encontrados en ella, 25 personas en total, han declarado que el grupo estaba integrado por 26.
Pérez, que ha dicho no poder aportar nuevos datos sobre esta búsqueda, que desarrollan efectivos de Salvamento Marítimo y del Grupo de Emergencias y Rescate del Gobierno de Canarias, ha explicado que dos de los inmigrantes localizados fueron inicialmente conducidos a un centro de salud para evaluar su estado, al presentar síntomas de malestar e hipotermia.
En las dependencias sanitarias donde se les prestó asistencia se confirmó que no presentaban patología de gravedad alguna, por lo que se les dio el alta, ha añadido.
Esos dos inmigrantes viajaban en la primera de las pateras arribadas esta noche a San Bartolomé de Tirajana, que llegó hacia las 03.30 horas a la playa de Meloneras, con 23 varones y dos mujeres a bordo.
La segunda embarcación con inmigrantes, todos ellos de origen subsahariano, igual que en la primera, fue interceptada por la Guardia Civil hacia las 05.30 horas y cuando estaba a unas tres millas de la playa de San Agustín, en el mismo municipio.
Las 25 personas que ocupaban esta patera fueron trasladadas en la patrullera de la Guardia Civil hasta el puerto de Arguineguín, donde recibieron atención médica de personal de Cruz Roja y del Servicio de Urgencias Canario.