No hay margen para más errores. Esta es quizás la frase más repetida de las últimas semana cada vez que el Sevilla tiene que jugar a domicilio. Pero ciertamente la cuenta atrás ahora sí parece un hecho. Sólo restan dos duelos lejos de Nervión y los de Emery saben que están obligados a sumar algo más que una victoria para tener opciones de alcanzar la séptima plaza liguera.
El domingo, la primera. Además, en un estadio que a lo largo de dos décadas no se le ha dado excesivamente mal. Es más, en la Rosaleda se han obtenido triunfos de postín, como aquel primero en 1999 en el que con un tanto de penalti del genio Vasilis Tsartas el Sevilla permitió luchar por un ascenso que alcanzó.
Son once los choques de rivalidad andaluza disputados en la Costa del Sol. Cinco de los cuales tuvieron color rojiblanco. Además, desde la derrota en 2005 ante los malagueños, el Sevilla encadenó hasta la pasada temporada un ciclo de de resultados positivos, logrando hasta 10 puntos de los 12 disputados. Eso sí, en la pasada campaña el triunfo fue para los locales.
Para el domingo, los de Nervión contarán con un numeroso grupo de sevillistas desplazados. En cambio, el Málaga no tendrá ni a Sergio Sánchez, Demichelis y Willy.
Fernando Navarro: “Hay que ganar todo”
El defensor rojiblanco comentó en sala de prensa que las cuentas para alcanzar Europa “están claras”. “Hay que intentar ganar si se puede todo y si no tres partidos...”, afirmó el catalán.
El División de Honor a la final nacional (1-2)
Nueva alegría para el sevillismo de sus juveniles. Ayer, derrotó a Las Palmas con los tantos de Carlos y Pavón y se metieron por tanto en la segunda final consecutiva de la Copa de Campeones.
