Buenos datos con los libros

Huelva ha cerrado su Feria del Libro, pero ya piensa en la del próximo año, aunque al menos, lo hace con la satisfacción de que, según se desprende del balance provisional hecho por Ayuntamiento y libreros, las ventas han crecido en un quince por ciento con respecto a las del año anterior. Aunque está claro que la fiesta de los libros tiene valor por sí misma, por lo que significa de promoción de la cultura y de la lectura, no está de más, para que los libreros se sigan año tras año embarcando en esta aventura, que las cifras de ventas también acompañen. Porque, al fin y al cabo, para asegurar que este acontecimiento, decano entre los que de la misma clase se llevan a cabo en el resto de capitales andaluzas, siga teniendo continuidad edición tras edición, es fundamental precisamente, que haya buenas ventas. Pero el balance es positivo no sólo por los libros vendidos, sino por la dinamización que produce en el centro histórico de la capital la presencia de los expositores libreros situados en la plaza de las Monjas, una dinamización que supone que los comercios cercanos también se beneficien. Dar vida a la ciudad con la literatura como argumento principal, es un regocijo, al que, en esta ocasión, ha ayudado el buen tiempo disfrutado estos días, pero también, el sinfín de actividades para todos (y en especial para los pequeños lectores), que trufan la feria del libro.