La proliferación de bares y pubs en la calle Las Cortes ha cambiado totalmente la configuración de esta vía durante el verano con sus terrazas, pero también ha cambiado el comportamiento del público a la hora de ver el discurrir de las hermandades.
En total son seis bares o pubs, además de una tienda de venta de chuches y bebidas las que se concentran en un tramo que va desde la Plaza del Rey hasta la intersección de la calle Cervantes y que a lo largo de las Semana Santa pasada ha mostrado todas sus caras.
Ha habido hosteleros que han querido potenciar que el público viera el paso de las cofradías desde su bar aportando el cante de saetas desde un balcón, pero el aspecto de las aceras con personas con copa en mano y el estado que va propiciando la ingesta de alcohol, mantenían un ambiente poco propicio para las hermandades, y que lógicamente ha tenido sus cotas altas y bajas.
Ha habido hermandades que no han tenido problemas por que su horario de tarde no coincide con la concentración de público o la hora de tomar copas, pero otras han sufrido coincidir con el máximo ambiente. Incluso en la Plaza del Rey, también van encontrado ya problemas. Un hermanos sufrió la caída de una bebida sobre su hábito nazareno.
El Domingo de Ramos, con el público tomando copas desde el mediodía hasta la noche o el mismo Jueves Santo o Madrugada, sufrieron las consecuencias de la aglomeración de público tomando copas.
La hermandad del Nazareno ya huyó a comienzos de la última década de la Plaza del Rey por el ambiente que rodeaba la Plaza del Rey en la Madrugada del Viernes Santo, y optó por pasar por las calles Calderón de la Barba y trasera del Palacio Consistorial para seguir por Cayetano del Toro, sin embargo, la botellona del Mercado Central obligó a volver a la Plaza del Rey.
La configuración de la ciudad impide que existan muchas alternativas a esta situación, pero hay hermandades que estudian ya esas posibles alternativas. Unas alternativas que pueden ser para el próximo año, o quizás con un margen de espera, por si el público guarda el comportamiento adecuado al paso de la hermandad. No obstante, fueron varias cofradías las que en 2010, tras la Magna, procesionaron por Pérez Galdós, y resultó una buena calle.
