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La pegada de Cristiano decide el último Athletic-Madrid en 'La Catedral'

No le tiene en demasiada estima la vieja 'Catedral' al 'crack' portugués, que tampoco hace mucho por ganarse el cariño

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La pegada de Cristiano Ronaldo ha decidido el último clásico Athletic Club de Bilbao-Real Madrid en San Mamés, un partido que ha terminado con el tercer 0-3 consecutivo en este enfrentamiento en los últimos años tras dos primeros tantos del portugués y un tercero que cerró el marcador del argentino Gonzalo Higuaín.

No le tiene en demasiada estima la vieja 'Catedral' al 'crack' portugués, que tampoco hace mucho por ganarse el cariño, pero seguro que la entendida grada rojiblanca sí valora la entidad del fútbol de un jugador como CR7.

Que tiene entre su muestrario especialidades como las que le han permitido hoy batir dos veces a Gorka Iraizoz, la primera con un espléndido golpe franco desde fuera del área directo a la escuadra y la segundo con un no menos meritorio salto de cabeza y consiguiente testarazo.

Con todo lo que tiene en su plantilla, el Madrid ha superado más claramente en el marcador que sobre el terreno de juego a un rival muy diezmado para fortalecer la segunda plaza de la tabla ante el acoso del Atlético de Madrid y mantener al menos en cierta tensión en el liderato al FC Barcelona, del que sigue a 13 puntos.

El Athletic ha hecho unos de su mejores partidos de la temporada, pero eso solo le ha dado para apurar por momentos a un rival muy cómodo con un primer gol al minuto del choque.

Aunque su situación no es para alarmarse en exceso, al conjunto rojiblanco se le ha acercado a 8 puntos los puestos de descenso que ahora marca el Zaragoza y bien hará en intentar certificar la permanencia la próxima jornada en Riazor para evitar problemas posteriores.

Un gol de Ronaldo a los 70 segundos de juego, un precioso golpe franco directo a la escuadra del jugador portugués, pus rápido el partido de cara para el Real Madrid, que pareció tener todo dominado y con cierta comodidad. El disparo fue perfecto por encima de una barrera, eso sí, de escasa envergadura.

Pero con el paso de los minutos, el Athletic se fue serenando y mediado el ecuador del primer tiempo empezó a percutir sobre la defensa blanca. A la que superó Susaeta en una internada por la banda derecha llegando desde atrás en el minuto 20, que finalizó con un tiro cruzado, abajo, buscando el palo largo. Diego López le dio buena réplica mandando el balón a córner.

Un disparo de Modric en el minuto 35 dio paso a un tramo final del primer tiempo a ritmo vertiginoso y con detalles técnicos de consideración. Varios de Herrera, barroco pero exquisito, y algunos más de Di María, Xabi Alonso, Cristiano, Marcelo y Muniain.

En esa dinámica, un par de caídas seguidas de Susaeta en el área, en el minuto 39 encresparon al público de San Mamés, muy crítico con el arbitraje.

Sobre todo después de que señalase falta en una disputa entre Albiol y Llorente tras la que se quedó solo entrando al área al filo del descanso.

Antes, Di María remató al larguero la segunda gran ocasión del Madrid en el 42, una escapada por la banda del argentino hasta quedarse solo ante Iraizoz. Dos minutos más tarde, Herrera buscó desde la frontal el palo izquierdo de la meta blanca. Pero Diego López, espléndido por segunda vez se interpuso en sus intenciones.

La segunda parte empezó trabado, con Ronaldo metido en diatribas, San Mamés afeándole la conducta y el árbitro dándole explicaciones. Empezaron a caer las tarjetas mientras el Athletic no quería cejar en el empeño de empatar y el Madrid que el choque fuese dándole la oportunidad de cerrarlo.

Y la primera se la dio en el minuto 54, en el que Iraizoz detuvo dos disparos seguidos de Marcelo y Benzema, el segundo, a rechace del propio portero navarro, mucho más peligroso.

No parecía una jugada para tanto una falta lejana que sacó al área Xabi Alonso en el 78, pero un gran salto de Ronaldo superando a toda la defensa local acabó en el 0-2.

Y ocho minutos después, el Madrid dio la puntilla. Higuaín recibió solo por la derecha ya en el área, un defensa le habilitó en el otro lado y el argentino definió con un disparo cruzado con Iraizoz muy metido bajo palos.

Un par de escaramuzas madridistas más cerca del área local, de Callejón, y la insistencia de un Athletic ya más desordenado han cerrado el que es uno de los clásicos por antonomasia del fútbol español, un Athletic-Real Madrid en el viejo San Mamés.

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