El tiempo en: El Puerto
Lunes 08/07/2024  

Deportes

Ni el ‘seis’ evita el “Del Nido vete ya”

Tres cuartas partes de la grada, disconforme con el 97% de los accionistas que hace escasos días ratificaron al presidente en su cargo.

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • En la etapa dorada -

Mal asunto para Del Nido. Corría el minuto 70. Fazio, por enésima vez se autoexpulsa en un penalti de libro. El Sevilla va por detrás ante un postrero Málaga. Eliseu no perdona y pone el 0-2. La tragedia se consumó...


El gol, aparte de lapidar toda opción de remontada en un Sevilla con doble, pésima, mísera, o cómo quieran denominar actitud, sentencia al presidente de la entidad. “Del Nido vete ya, Del Nido vete ya, Del Nido vete ya”. Tal vez, muchos comentarán que tal elocuencia vuelve a sonar como cada fin de semana en el Pizjuán. Es cierto. Pero, a diferencia de otras ocasiones, en esta sí que al menos tres cuartas partes de la grada apostilló con el canto. Ahora, la afición había tomado una decisión tan tajante como dispar, sobre todo, cuando hace apenas un mes en la victoria ante el Betis muchos de los que el sábado señalaban al palco entonces apuntaban a la grada baja de Gol Norte. Cuando la pelotita no entra...


Son las consecuencias a tener en cuenta, cuanto menos, en la cruel derrota ante el Málaga más eficaz de toda la historia. Una situación que pone a Míchel en el disparadero. Sí, la convulsión en la grada es el peor síndrome para el técnico madrileño. La razón es muy sencilla. El equipo vive en la mediocridad de la tabla. El sevillismo se da la vuelto hacia el palco. Y Del Nido, en la obligación de evitar a los francotiradores. O él se va o terminará por echar a Míchel. Otra estrategia al aire.

 

Del Nido: “Me iría antes de que se echaran a la calle”

Son palabras textuales de José María del Nido, expuestas por él mismo en 2009. Incluso, advertía que “la afición es capaz de derrocar a un dueño”.

 

Anoeta, el inicio de Míchel y ¿su fin?

Ni un año desde la llegada de Míchel al Sevilla. Se estrenó, precisamente, en Anoeta y perdió. Tal vez, una nueva derrota provoque su adiós.

 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN