Toro comentó que las bandas gallegas “se están reorganizando” y que están lideradas por los considerados narcos históricos, pues razona que en el tráfico de drogas y el crimen organizado “no existe la reinserción. Entre el 70% y el 80% vuelve a reincidir”.
La tradicional ruta marítima de la cocaína, donde la carga partía en un pesquero desde Sudamérica y a la altura de Azores era recogida por clanes gallegos, quedó inoperativa tras los golpes asestados por las fuerzas de seguridad, especialmente en las operaciones Tabaiba y Giga, en 2009.
Entonces fueron detenidos los principales transportistas y sus colaboradores y la infraestructura quedó desmantelada.
Época
“Esto marcó un cambio”, señaló Toro, quien añadió que las bandas colombianas pasaron a intensificar el envío de la droga en contenedores mezclada con pescado congelado y otras mercancías, sobre todo a través de los puertos de Algeciras, Valencia y Vigo.
Sin embargo, el presidente de la coordinadora antidroga Alternativas, Francisco Mena, señaló que este desvío no se ha percibido en el Campo de Gibraltar, donde la intensidad de la entrada de contenedores de cocaína no se ha relajado, el último de los cuales entró en la víspera de la Navidad en un cargamento de pañales.