"Los próximos días y semanas serán críticos. Está claro que la era (del líder libio Muamar) Gadafi está llegando a su fin", ha señalado Clinton, argumentando que "la situación es muy fluida" desde que los rebeldes entraron en Trípoli el pasado fin de semana.
Así, ha indicado que "es fundamental" que el Consejo Nacional de Transición (CNT) "establezca rápidamente contacto con las comunidades y los líderes libios para garantizar el orden, el suministro de los servicios básicos y allanar el camino hacia una transición completamente pacífica".
"La Libia del futuro únicamente estará en paz si los líderes y el pueblo libios se unen unos a otros en un espíritu de paz. En la nueva Libia no puede haber lugar para los ataques de revancha y represalia", ha subrayado.
No obstante, ha advertido al CNT de que una vez derrocado Gadafi, la comunidad internacional permanecerá vigilante para garantizar que cumple con su promesa de "construir un Estado tolerante y democrático que respete los Derechos Humanos de todos sus ciudadanos".
En la misma línea, ha adelantado que esta vigilancia se centrará en los depósitos de armas del país. "Deben garantizar que las armas no supongan una amenaza para sus vecinos, ni caigan en las manos equivocadas", ha alertado.
En este sentido, informes recientes de Naciones Unidas y Estados Unidos revelan que las únicas armas capaces de amenazar la seguridad de la región son los misiles tierra-aire conocidos como MANPADS, ya que las armas químicas --como el gas mostaza-- son más una amenaza ambiental que militar.
Finalmente, la secretaria de Estado ha reiterado el llamamiento de Estados Unidos a que "Gadafi, su familia y sus partidarios pongan fin a la continua violencia por el bien de su propio pueblo y del futuro de Libia".
APOYO A LOS REBELDES
Por otro lado, Clinton ha garantizado que la comunidad internacional, incluido Estados Unidos, continuará apoyando a los libios "para que escriban el próximo capítulo de su Historia", ya que "el futuro de Libia no está garantizado". "Aún queda un trabajo considerable por hacer", ha subrayado.
"Juntos hemos prevenido una masacre y hemos apoyado los esfuerzos del pueblo libio para obtener la libertad. Seguiremos apoyándoles en la medida en que asuman sus compromisos humanitarios y de reconstrucción con el país. El pueblo libio ha hecho su revolución y continuará liderándola, pero se merece nuestra ayuda", ha aseverado.
En concreto, se ha referido a la petición de los rebeldes de desbloquear los fondos del régimen libio, indicando que el Grupo de Contacto para Libia --al que Estados Unidos pertenece-- mantiene firme su compromiso de atender las "urgentes necesidades financieras del CNT".
Además, la jefa de la diplomacia estadounidense ha instado a otros países a adoptar medidas similares, ya que "todavía hay muchas cosas que están por hacer".
