Ryder dijo sentirse “muy agradecida” por poder formar parte del elenco y por su carrera en el cine y dijo no pensar “demasiado” en los problemas que la habían hecho alejarse de la industria.
En 2001, la artista perpetró un robo en una tienda. “Tuve que alejarme porque trabajaba tanto que me di cuenta de que no tenía una vida”, declaró.