Con la vista puesta en el horizonte del 2028, Puerto Sherry ha asumido un desafío ambicioso: ser el puerto más sostenible de España. "No es una tarea fácil, pero estoy seguro de que lo lograremos", afirmó Nicolás Figueras, director general de Puerto Sherry.
Este compromiso va más allá de seguir una moda pasajera. "Es una cuestión de responsabilidad. Vivimos del medio ambiente, estamos estrechamente relacionados con el mar, y debemos cuidarlo", declaró Figueras. Esta imperante necesidad es compartida por los usuarios, quienes demandan un valor añadido. "Cada vez estamos más concienciados", señala Figueras.
El objetivo claro es disfrutar del mar en armonía con la naturaleza, creando un espacio de ocio limpio y sostenible, con fauna y flora diversa. Puerto Sherry ya ha implementado medidas y tecnologías avanzadas, logrando reducir el consumo de agua y luz en un 12% anual en los últimos tres años. Se espera aumentar este ahorro con la instalación de plantas fotovoltaicas para lograr la autosostenibilidad.
El puerto deportivo ha adoptado medidas pioneras, como un sistema de filtros de decantación que recoge el 98% de los microplásticos en el varadero. Estos cambios están teniendo un impacto positivo en la ciudad, contribuyendo a mejorar las playas y reduciendo la huella de carbono entre un 40 y 52% este año.
Pero Puerto Sherry no se conforma y va más allá. "Tenemos la intención de lanzar una campaña a principios de año para convertirnos en un puerto de plástico cero", revela Figueras. La meta es transformar no solo el espacio físico sino también las mentalidades. "Este es un compromiso de todos", concluye Figueras.
Puerto Sherry se erige así como un faro de cambio hacia un futuro más sostenible, demostrando que la responsabilidad medioambiental puede ir de la mano con el disfrute del mar y la preservación de nuestro entorno natural.
