Así lo ha manifestado este sábado, a pregunta de los periodistas, la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, en Badajoz.
Pereira ha recordado que cuando tuvo lugar el accidente ferroviario se abrieron tres investigaciones: la del Juzgado de Instrucción número 3 de Mérida; la del Ministerio de Fomento, ADIF y Renfe; y la de la Inspección de Trabajo.
Las investigaciones llevadas a cabo por la Policía Judicial y la Guardia Civil, a instancias del juzgado, dieron como resultado la detención de una persona, según ha apuntado.
Esta persona prestó este viernes declaración ante el juez y ha sido puesta en libertad con cargos por homicidio imprudente.
Pereira ha precisado que el vigilante tiene la obligación de presentarse cada lunes ante el juzgado.
Dos muertos y diez heridos, el más grave un niño de tres años, fue el resultado del accidente ocurrido el lunes al arrollar un tren de viajeros a un camión que trabajaba en las obras del AVE Madrid-Lisboa, a la altura del apeadero de Carmonita.
Los dos hermanos de tres y siete años heridos en el accidente continúan ingresados en el Hospital Clínico de Salamanca.
El pequeño sigue con una evolución lenta, pero favorable, y el mayor fue intervenido ayer de la fractura que tenía en la mandíbula, según Pereira.