Las movilizaciones de parte de los empleados del sector del metal iniciadas el pasado viernes siete, a la raíz de cuatro despidos en Mecamansol, contrata de Navantia, y la convocatoria de huelga indefinida desde el próximo lunes 17 de la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) ha llevado al comité de empresa y a la dirección del astillero de Cádiz ha mostrar su rechazo.
En un comunicado conjunto, denuncian “presiones injustificadas” a “todas aquellas personas que prestan servicios” en la planta de Navantia de la capital gaditana “por representantes de organizaciones sindicales ajenas al centro de reparaciones”, y remarcn que el “conflicto laboral” es ajeno a la empresa.
Asimismo, advierten de que “las coacciones y los bloqueos que se vienen produciendo en el acceso a nuestras instalaciones están impactando en el normal desarrollo de la producción”, hasta el punto de que “están poniendo el riesgo de los compromisos contractuales asumidos por Navantia con sus clientes con la potencial cancelación de la reparación de buques ya programados”.
De hecho, tal y como adelantó esta mañana VIVA CÁDIZ ya se han producido recortes en los encargos que se estaban ejecutando.
Por ello, tanto el comité de empresa como la dirección de Navantia Reparaciones Cádiz llama a “toda la industria auxiliar del astillero de Cádiz para retomar la normal actividad en aras de garantizar la carga de trabajo y el actual nivel de empleo”, reservándose las medidas oportunas para “asegurar el retorno a una actividad normal en el astillero”.