El embalse de Benínar se ha situado este viernes a un 9,94 por ciento de su capacidad al disminuir progresivamente el volumen de agua embalsada hasta quedar en 6,25 hectómetros cúbicos, esto es, la mitad de los recursos hídricos que contenía en las mismas fechas del pasado año.
Según los datos del sistemas automático de información hidrológica (SAIH) de Hidrosur, recogidos por Europa Press, el embalse que abastece al Poniente almeriense con los recursos que capta del Río Grande de Adra que desciende de Sierra Nevada cuenta con una capacidad total para acoger 62,9 hectómetros cúbicos.
El volumen de agua embalsada ha descendido en la última semana en 0,14 hectómetros sin que el agua acumulada a razón de la pluviometría haya aumentado ante la falta prolongada de lluvias.
Desde que comenzó el año hidrológico el pasado 1 de octubre, el pantano ha acumulado 146,6 litros por metro cuadrado de agua mientras que, en las mismas fechas del año pasado, había acumulado 184,3 litros por metro cuadrado, es decir, un 25,7 por ciento más.
En esta línea, los datos revelan que el volumen de agua embalsada a finales de abril de 2022 era de 12,85 hectómetros cúbicos, esto es, 6,6 hectómetros de agua más de los que contiene actualmente el segundo embalse más grande de la provincia por detrás del de Cuevas del Almanzora.
En total, junto con el embalse de Cuevas del Almanzora que se sitúa a un 13,44 por ciento de su capacidad con 21,21 hectómetros cúbicos de agua embalsada --frente a los 38,55 hectómetros de 2022--, los pantanos de Almería acumulan 27,46 hectómetros cúbicos de agua cuando, en la misma fecha del pasado año, contenían 51,4 hectómetros ante una capacidad total de embalse que asciende a los 220,77 hectómetros.
