La Guardia Civil ha intervenido 350 kilos de precursores de explosivos en el garaje de un bloque de viviendas de Reus (Tarragona), y ha denunciado al propietario de las sustancias, informa este domingo en un comunicado.
La actuación forma parte de una investigación de venta ilegal de precursores de explosivos y es "una de las mayores aprehensiones" realizada en España.
El vendedor tenía almacenados los explosivos en bidones en el garaje comunitario del bloque de viviendas donde residía, generando un "riesgo considerable" para sus vecinos porque el espacio no tiene ninguna medida de seguridad.
La investigación empezó en septiembre cuando efectivos de la Jefatura de Información de la Guardia Civil detectaron un intento de venta ilegal de este producto a través de internet.
Los precursores intervenidos eran de clorato potásico, una sustancia precursora utilizada por "varias bandas terroristas" como base para la fabricación de numerosos explosivos.
Es una sustancia extremadamente sensible a cualquier fuente de ignición, por lo que tuvo que ser retirada por Técnicos en Desactivación de Explosivos (Tedax) de la Guardia Civil.
